miércoles, 23 de septiembre de 2009

La sensualidad tiene nombre de mujer emancipada


Hace ya un tiempo, leyendo una revista literaria, cayó ante mis ojos una fotografía de Simone de Beauvoir desnuda. No se le ve el rostro, está de espaldas recogiéndose el pelo mientras se mira al espejo. Para mí fue un impacto visual y erótico tremendo. No se trataba de quien fuera el personaje, podría haber sido cualquiera, era la escena, ese cuerpo de mujer, a su aire, transmitiendo una naturalidad pasmosa y sobre todo una libertad manifiesta. Ahora que he vuelto a dar con ella, con la fotografía, sigo sintiendo la misma atracción casi religiosa por esa instantánea. Me convierto en un voyeur de pasmoso sosiego, en un erotómano de acuarela. Contemplo su belleza física, y ahora sé, por mis posteriores lecturas, que fue una mujer que intentó vivir la vida que imaginaba y que luchó por ella. Asombrosa fotografía, hermosoura de alma y cuerpo en una misma instantanea.

2 comentarios:

  1. ¡ Olé, olé y olé!
    Se puede decir más alto pero no más claro.
    Hermosa fotografía, hermoso cuerpo, hermosa mujer.
    Besos.
    katia

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  2. No conocía la fotografia, es un cuerpo bello,pillado en un momento cotidiano.A veces, un descubrimiento como el tuyo hace que se tambaleen los cliches que yo tenía de la artista: racional,perseverante,dura y con aristas.Este momento lleno de sensualidad y desprevenido, es perfecto.
    BS

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