lunes, 29 de noviembre de 2010

Carmen Moreno

ayer fue un día agitado, difícil y con continuas pendientes, de las que te ponen a prueba la paciencia. pues en ésas estaba, cuando llegó a mis ojos una reseña sobre "la vida después" de marina sanmartín, firmado por carmen moreno. lo que sorprende es que no se trata sólo de una crítica al libro. nos pone a caer de un burro. la crítica siempre es bienvenida si es crítica constructiva y se lanza desde el corazón. pero en las palabras de carmen se entrevé ciertas ganas de tirar a dar, y que conste que asumimos los errores y las erratas. hasta ahí bien, pero luego viene la descalificación al catálogo de la editorial y a sus autores. para ella: "Baile del sol hizo bien su trabajo, y reconozco que no suele hacerlo ni siquiera regular. De hecho, cuando abrimos el libro ya vemos la mano inequívoca de una editorial que no ha mantenido la calidad de su catálogo como seña de identidad. Ellos han apostado más por la cantidad que por la calidad. Pero, en ese paisaje desierto de literatura que ha conseguido crear la editorial canaria, puedes encontrar pequeñas joyas". no entiendo bien si cuando se refiere a la calidad de nuestro catálogo, donde hay autores como jorge riechman, roque dalton, carlos pinto grote, henry david thoreau, sia fiegel, antonio orihuela, carmen camacho, robert louis stevenson, 23 pandoras, alfred nobel, eduardo milán, ralph w. emerson, ana pérez cañamares, manuel moya, fernando palazuelos, david gonzález, eva vaz, marcelo luján, jose mª cumbreño, fernando pessoa, inma luna, joaquim arena, déborah vukusic, roman simic, andrej blatnik, ioan es. pop, august strindberg, alonso quesada, mada alderete, uberto stabile y un largo etc., se refiere a ellos como a las "pequeñas joyas" o simplemente forman parte de esa masa que conforman "el paisaje desierto de la literatura" que editamos. me pareció una falta de respeto por los autores y sobre todo viniendo de una crítica que, me entero luego, se dice también poeta. a partir de ese momento, afortunadamente me quedé más tranquilo y ya entonces sólo me he preocupado por los errores de edición, asunto al que hay que prestarle mayor atención. para mí el criterio de alguien que borra con unas cuantas pulsaciones el trabajo y la obra de otros del mismo gremio al que dice pertenecer, simplemente no existe. sólo espero que juzgue su obra con el mismo rasero con el que lo hace con la de los demás. me gusta el comentario que han dejado a la reseña de una de sus obras, "cuando dios se equivoca" que reza: dios no se equivoca, carmen sí.

viernes, 19 de noviembre de 2010

como un siroco

edem awumey

por qué será que rotamos y rotamos alrededor de una misma idea y, hasta que esa idea no se transforma en realidad, la rotación sigue su curso igual que un danzarín turco sobre su eje. va para dos años que la colección sobre literatura africana nos surgió para dar continuidad a una obsesión que está instalada en mí desde hace décadas, los primeros títulos de autores africanos vinieron ya en los inicios de la editorial, allá por los finales de 1992. hace un año, pusimos el primer peldaño en esta colección “áfrica” con el poemario los aromas esenciales del mozambiqueño guita jr., pero ahí nos atascamos, una colección en la que se combinaran distintos géneros literarios no nos pareció a posteriori buena idea para que despegara y pudiera llegar a las librerías con la mejor de las garantías. por ello, tras nuevas deliberaciones y pasar la dirección de la misma a jorge portland y su sapiencia, arrancaremos en marzo del 2011 sólo con narradores -los poemarios en ciernes, como la dolorosa raíz de macondo de conceiçao lima, se recogerán en la colección “poesía”-. abrirán fuego wole soyinka con la estación del caos, y abdourahman a. waberi con paso de lágrimas. seguidamente chris abani con graceland y edem awumey con pies sucios. pero seguiremos girando y girando para que otros autores continentales vayan integrándose en este baile endémico y visceral de sueños y letras, de papel y tinta, de bits y leds.