Después de una semana acompañando a Inma por tierras croatas, volví relajadito y con ganas de ir tomándole nuevamente el pulso a las actividades editoriales. Ahí estaban dos ferías por organizar y llevar -Tenerife y Madrid-. Especialmente la última, donde por primera vez, y tras muchos años de intentos, el nombre de la editorial lucía estampado en una de las casetas instaladas en el Retiro. Para estar a la altura de las circunstancias, tuvimos que engrasar la máquina de edición. Durante la última semana de mayo y la dos primeras de junio, sacamos más de 20 títulos entre novedades y reediciones. Fue la ocasión para ponerle cara a muchos autores que sólo conocía a través de mail o teléfono.
También tuvimos unos días de especial difusión en los medios, gracias a la mesa redonda sobre el worst seller, ya que fuimos una de las editoriales incluidas en dicha mesa -pero ya la editora de la editorial habla de ello en su blog (http://lagatacristi.blogspot.com/).
Después de 17 días intensos entre caseta, Leganés y Tenerife, llegó la hora del balance y asentir con los resultados. Nos sentimos contentos con el resultado y volveremos a repetir el próximo año.
Ahora, he vuelto al relax, con Inma me he venido a celebrar su cumple, la he traido por sorpresa a Budapest y tras dos días en ella, la sonrisa en el semblante y el sosiego se va acumulando en la patas de gallo. Recargando pilas y preparando la estrategia para julio y agosto, los meses que más a gusto paso trabajando detrás del ordenador.
Pero de aquí a allá, seguiré asomándome a esta ventana y seguiré contando mis andares.
Sólo espero que el tiempo en que esto suceda, no se alarge como esta última vez.
Pues bienhallado compadre. Me alegro de que estés (más) bueno ;-)
ResponderEliminar